La fascinación intensa que muchos niños desarrollan por los dinosaurios, usualmente entre los 3 y 6 años, no es solo un gusto pasajero.
- Conocimiento detallado e inteligencia
- Autoridad, poder y manejo del terror
- El rol de la fantasía y la novedad
- Un llamado a la acción para padres y educadores
Investigaciones en psicología y pedagogía sugieren que este "interés intenso enfocado en la adquisición de conocimiento" es un indicador de inteligencia superior a la media y fomenta el desarrollo de habilidades cognitivas avanzadas que serán cruciales en su vida adulta.
Conocimiento detallado e inteligencia
Los dinosaurios, con su inmensa variedad de especies y características, representan un desafío cognitivo estimulante para los niños.
Distinguir entre un Estegosaurio y un Braquiosaurio requiere y demuestra una notable capacidad de memoria y una gran atención al detalle.
Además, exige la comprensión de conceptos complejos, como las diferencias morfológicas y la capacidad de categorizar información.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Indiana y la Universidad de Wisconsin descubrió que los niños con este tipo de interés fijo en un tema tienden a ser más inteligentes. ¿La razón? Ponen mayor atención y desarrollan habilidades para entender esa fijación, procesando información más rápidamente.
Este tipo de pasión intensa impulsa el desarrollo de:
- Mayor perseverancia. Clave para abordar problemas de manera estratégica y creativa.
- Mayor capacidad de atención.
- Habilidades de pensamiento complejo más sofisticadas.
Kelli Chen, terapeuta ocupacional de Johns Hopkins, sostiene que aprender a través del juego interesado es la forma más efectiva de aprendizaje infantil, ya que los niños aprenden mejor cuando están motivados por lo que aman.
Autoridad, poder y manejo del terror
La fascinación de los niños por estos "malos de la prehistoria" tiene también una base psicológica profunda.
Según el paleontólogo Kenneth Lacovara, uno de los atractivos principales es que, por primera vez en sus vidas, los niños pueden "saber más que sus padres". Esta dinámica los hace sentir poderosos, alimentando su autoestima y el deseo de aprender.
Al tener un conocimiento detallado sobre un tema específico, como si un dinosaurio era carnívoro o herbívoro, los niños se sienten ubicados en una posición de “experto”.

Esto aumenta su confianza y les permite participar en conversaciones más complejas con adultos, favoreciendo el desarrollo de habilidades sociales fundamentales.
La psicóloga infantil Laverne Antrobus destaca también la "curiosa mezcla de terror y excitación que todos sentimos en torno a los dinosaurios".
El hecho de saber que existieron de verdad, pero que ya no están (fueron borrados hace 66 millones de años), brinda una sensación de seguridad.
El niño puede jugar y leer sobre ellos, imaginando la vida a su lado, sin la necesidad de experimentarlo en la realidad.
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El rol de la fantasía y la novedad
Para el psicólogo Fernando Mata Rosas, este gusto tiene una base psicológica, ya que los dinosaurios representan simbólicamente una forma de manejar el poder y la fuerza.
Entre los tres y siete años, la fantasía es esencial para el desarrollo cognitivo. Los dinosaurios se convierten en un medio para ejercitar la imaginación y estimular el pensamiento simbólico, ayudando a entender la realidad.
Además, el interés se mantiene vivo porque aún se siguen descubriendo nuevos fósiles (cerca de 30 nuevas especies cada año).
Descubrimientos como el Patagotitán en Argentina, la criatura terrestre más grande encontrada hasta la fecha, mantienen la emoción del descubrimiento paleontológico palpable.
Un llamado a la acción para padres y educadores
Si los niños y niñas muestran un interés profundo en los dinosaurios (o cualquier otro tema), la clave es apoyarlos y alentarlos a explorar su pasión a profundidad.
Este proceso, según los expertos, les ayudará a desarrollar habilidades como la concentración, el pensamiento crítico y la capacidad de resolver problemas de forma creativa.
La inteligencia no está ligada únicamente a los dinosaurios; cualquier pasión intensa puede conducir a un desarrollo cognitivo significativo.